mayo 28, 2006

LOS PORTADORES DE SUEÑOS

por Gioconda Belli

En todas las profecías
está escrita la destrucción del mundo.

Todas las profecías cuentan
que el hombre creará su propia destrucción.

Pero los siglos y la vida
que siempre se renueva
engendraron también una generación
de amadores y soñadores,
hombres y mujeres que no soñaron
con la destrucción del mundo,
sino con la construcción del mundo
de las mariposas y los ruiseñores.

Desde pequeños venían marcados por el amor.
Detrás de su apariencia cotidiana
Guardaban la ternura y el sol de medianoche.
Las madres los encontraban llorando
por un pájaro muerto
y más tarde también los encontraron a muchos
muertos como pájaros.
Estos seres cohabitaron con mujeres traslúcidas
y las dejaron preñadas de miel y de hijos verdecidos
por un invierno de caricias.
Así fue como proliferaron en el mundo los portadores de sueños,
atacados ferozmente por los portadores de profecías habladoras
de catástrofes.
Los llamaron ilusos, románticos, pensadores de utopías
dijeron que sus palabras eran viejas
y, en efecto, lo eran porque la memoria del paraíso es antigua
el corazón del hombre.
Los acumuladores de riquezas les temían
lanzaban sus ejércitos contra ellos,
pero los portadores de sueños todas las noches
hacían el amor
y seguía brotando su semilla del vientre de ellas
que no sólo portaban sueños sino que los multiplicaban
y los hacían correr y hablar.
De esta forma el mundo engendró de nuevo su vida
como también habia engendrado
a los que inventaron la manera
de apagar el sol.

Los portadores de sueños sobrevivieron a los climas gélidos
pero en los climas cálidos casi parecían brotar
por generación espontánea.
Quizá las palmeras, los cielos azules, las lluvias torrenciales
tuvieron algo que ver con esto.
La verdad es que como laboriosas hormiguitas
estos especímenes no dejaban de soñar y de construir
hermosos mundos,
mundos de hermanos, de hombres y mujeres que se
llamaban compañeros,
que se enseñaban unos a otros a leer, se consolaban
en las muertes,
se curaban y cuidaban entre ellos, se querían, se ayudaban en el
arte de querer y en la defensa de la felicidad.
Eran felices en su mundo de azúcar y de viento
de todas partes venían a impregnarse de su aliento
de sus claras miradas
hacia todas partes salían los que habían conocido
portando sueñossoñando con profecías nuevas
que hablaban de tiempos de mariposas y ruiseñores
y de que el mundo no tendría que terminar en la
hecatombe.
Por el contrario, los científicos diseñarían
puentes, jardines, juguetes sorprendentes
para hacer más gozosa la felicidad del hombre.

Son peligrosos - imprimían las grandes rotativas
Son peligrosos - decían los presidentes en sus discursos
Son peligrosos - murmuraban los artífices de la guerra.

Hay que destruirlos - imprimían las grandes rotativas
Hay que destruirlos - decían los presidentes en sus discursos
Hay que destruirlos - murmuraban los artífices de la guerra.

Los portadores de sueños conocían su poder
por eso no se extrañaban
también sabían que la vida los había engendrado
para protegerse de la muerte que anuncian las profecías
y por eso defendían su vida aun con la muerte.
Por eso cultivaban jardines de sueños
y los exportaban con grandes lazos de colores.
Los profetas de la oscuridad se pasaban noches
y días enteros vigilando los pasajes y los caminos
buscando estos peligrosos cargamentos
que nunca lograban atrapar
porque el que no tiene ojos para soñar
no ve los sueños ni de día, ni de noche.

Y en el mundo se ha desatado un gran tráfico de sueños
que no pueden detener los traficantes de la muerte;
por doquier hay paquetes con grandes lazos
que sólo esta nueva raza de hombres puede ver
la semilla de estos sueños no se puede detectar
porque va envuelta en rojos corazones
en amplios vestidos de maternidad
donde piesecitos soñadores alborotan los vientres
que los albergan.

Dicen que la tierra después de parirlos
desencadenó un cielo de arco iris
y sopló de fecundidad las raíces de los árboles.
Nosotros sólo sabemos que los hemos visto
sabemos que la vida los engendró
para protegerse de la muerte que anuncian las profecías.


DATOS BIOBIBLIOGRÁFICOS
Es poeta y narradora. Nacida en 1948 en Managua, Nicaragua, siguió a Ernesto Cardenal y Claribel Alegría, poetas que habían inaugurado una nueva visión de la poesía renovando las letras de su país. En 1975 se exilia en México y en 1976 fija su residencia en Costa Rica. Ha vivido en Los Angeles desde mediados de la década de los noventa. Gioconda Belli sorprendió desde su primer libro, Sobre la grama, con poemas eróticos en los que los instintos del cuerpo se expresan con entera libertad. Sus obras siguientes, si bien continúan en esa línea muestran también preocupaciones políticas y sociales.

mayo 26, 2006

DESARROLLO INTUITIVO



Holodinámica del Sexto Sentido

NUEVO LIBRO DE MIGUEL GRINBERG
Ediciones Mutantia

Durante los últimos años, la práctica intensiva de la meditación y un abordaje desprejuiciado a los temas de la “espiritualidad” (como actitud elevada no adosada a religiones, devociones irracionales o dogmas irreductibles), ha motivado mucha curiosidad sobre otras áreas cruciales a comienzos de un nuevo milenio, en especial la intuición, la expansión del área de la consciencia y el potencial evolutivo del ser humano.

El poeta y ecologista Miguel Grinberg, uno de los mayores difusores de literatura espiritual en nuestro idioma, editor de textos claves de Padma Sambava, Jalaludín Rumi, Mahatma Gandhi, el Dalai Lama y el Maestro Eckhart, traductor de numerosas obras de Thomas Merton, es autor de “El Poder de la Oración” y de profundos estudios sobre el pensamiento complejo de Edgar Morin y la psicología integral de Ken Wilber. Ofrece ahora DESARROLLO INTUITIVO, donde expone métodos naturales para el despliegue de nuestra capacidad intuitiva.

En base al estudio de tendencias actuales, expone además el modo intensivo con que la práctica meditativa ha penetrado en círculos del empresariado brasileño y hasta en estamentos jerárquicos del Banco Mundial. Además, abre rumbos en el campo de la llamada “neuroteología”. – Grinberg se inició en meditación tibetana en el Instituto Naropa de Colorado (EEUU) y ha creado un método de introspección reveladora llamado “Holodinamia”. Lo practica en la Argentina y en Brasil (desde la Villa Terapéutica de Campinas, San Pablo), ciudad donde acaba de exponerlo ante el X Congreso Holístico Internacional--V Congreso Transpersonal Internacional.


mutamiguel@hotmail.com

ECOLOGIA ESPIRITUAL

"En vez de maldecir la oscuridad,
es preferible encender una vela".
CONFUCIO


ENTREVISTA CON MIGUEL GRINBERG


En 1980 el poeta y ecologista Miguel Grinberg iniciaba en Argentina una revista pionera sobre los temas de una nueva conciencia planetaria: Mutantia. La publicación llevaba como subtítulo “zona de lucidez implacable”. Poco después, impulsó durante cinco años la llamada Multiversidad de Buenos Aires, donde junto a una infinidad de colaboradores espontáneos (entre ellos sus amigos chilenos Rolando Toro y Francisco Varela), dictó cursos fundacionales de filosofía holística, eco-pedagogía y meditación tibetana. Desde entonces, ha publicado como autor y traductor más de treinta libros entre los que se distinguen dos estudios editados por Campo de Ideas (España) sobre la obra de Edgar Morin y Ken Wilber. En estos días ha procedido a la refundación de la Multiversidad y planea para el segundo semestre de 2006 la reaparición de su mítica revista. A su regreso de Brasil, donde expuso sus visiones geo-espirituales durante el X Congreso Holístico Internacional realizado en la ciudad paulista de Campinas, lo interrogamos sobre sus actuales perspectivas.

--Uno de tus campos de acción, según vemos en el programa del encuentro brasileño, es la “holodinámica del sexto sentido”. ¿En qué consiste?

Se trata de un programa de meditación integrada que diseñé condensando fuentes diversas de Oriente y Occidente, con la finalidad de estimular el potencial intuitivo del individuo. Utilizo para ellos estímulos sonoros que en primera instancia sedimentan el “ruido interno” que nos impone la vida actual, y luego –progresivamente– inducen un silencio íntimo donde emergen de modo natural poderes que el ser humano posee, pero que la educación moderna no se ocupa de estimular. No lo propongo como una labor devocional ni como un recurso terapéutico, sino como algo más trascendente, vinculado a nuestro papel evolutivo en el planeta Tierra. En estos momentos se está desplegando en el universo una energía de elevación suprema que no es patrimonio de religión alguna, mientras al mismo tiempo la aguda crisis climática que sacude al globo terrestre equivale a las convulsiones de un parto universal. Es hora de renacer a partir de una espiritualidad ecológica.

--¿Cuáles fueron las fuentes o las enseñanzas que te proyectaron hacia este camino?

Bueno, fueron muchas y muy variadas, hasta que un día se amalgamaron por su cuenta o por algún mandato superior, y me permitieron diseñar lo que hoy llamo desarrollo intuitivo. Todo comenzó hace bastantes años durante un retiro que efectué en un monasterio en Kentucky (Estados Unidos) por invitación del poeta y monje trapense Thomas Merton, que cita nuestro encuentro en su libro “Diario de un ermitaño”. Después, estudié Teoría de Sistemas en la universidad de Nueva York, orientado por el visionario John McHale, y así la ciencia me enseñó que no somos un envase de carne lleno de impulsos dispares sino células sutiles de un organismo infinito. Luego, fui iniciado en meditación tibetana en el Instituto Naropa de Colorado y finalmente estudié los principios del Nada Brahma hindú: “el sonido es Dios”. Adapté todo a nuestra idiosincrasia sudamericana, dado que no pertenezco a la tradición oriental, ni soporto el legado imperial grecorromano, y sobrellevo con mi mejor ánimo la cultura judeocristiana que recibí como herencia de familia.

--¿Qué objetivos te guían en una nueva etapa donde por lo visto resurgen contextos que ya experimentaste años atrás?

Trato ahora de seguir puliendo mi propio ser como un prisma cristalino en el contexto del pensamiento complejo que impulsa Morin y la psicología integral de Wilber. Hemos ingresado a un ciclo histórico de evolución consciente donde la tierra será considerada un santuario y donde cada cual irá descubriendo en sí mismo una infinidad de potenciales sagrados. Al mismo tiempo, seremos testigos (y espero que no seamos víctimas) de inmensas convulsiones terrestres. Trato de confluir con otros que de uno u otro modo recorren senderos análogos. Coopero con amigos que están formando una red de valles ecológicos libres de transgénicos en el Valle de Punilla y Traslasierra (Córdoba), y tal vez surja allí una eco-aldea autosuficiente. La nueva cultura brotará de un empalme inédito de la psicología, la física cuántica y la teología ecuménica. Oikos, el término griego que significa “morada”, no sólo dio origen a este término de visión universalista, sino también a la ecología y a la economía. Es hora de revitalizar el Génesis. Todos podemos ser Adán y Eva recreando en Paraíso, bajo cinco ópticas meditativas: reflexión, claridad, integración, metamorfosis y serenidad.

mayo 19, 2006

LOS AÑOS 60 QUE NO NOS CONTARON







Córdoba, Argentina, Lunes 21 de junio de 2004


El campo magnético de la revolución lo absorbía todo: ideas, libros, canciones, películas y hasta vidas enteras. Eran los años ’60, cuando el mundo parecía moverse hacia una rebeldía incorregible y los dedos en “V” funcionaban como una contraseña entre los iniciados en la insurrección. Como tantos otros, Miguel Grinberg vivió esa década y la que le siguió montado en la utopía de que el arte contribuía a ampliar las conciencias y tendría un rol decisivo en las batallas por un mundo mejor.

Hay dos fotos que lo muestran parado en el corazón de la turbulencia cultural que se estaba gestando. En una de ellas, un Miguel Grinberg jovencísimo aparece junto a Nicanor Parra y Allen Ginsberg, el poeta norteamericano de la generación beat cuya sola mención, en los círculos más politizados de la Argentina, era mala palabra y sinónimo de imperialismo yanqui. En la otra foto, se lo ve junto a Witold Gombrowicz, el novelista polaco que se transformaría en uno de los nombres fundamentales de la literatura nacional.

Grinberg, uno de los pioneros del periodismo alternativo en el país, acaba de publicar dos libros que regresan a aquellos años sin ningún tipo de nostalgia. En La generación “V”. La insurrección contracultural de los años ’60 (editorial Emecé), recopila una serie de ensayos y manifiestos, en su mayoría textos de intervención de un tiempo en que revolución rimaba con cine y poesía, y rock con liberación. También incluye una extensa e inédita entrevista a Jorge Romero Brest, el hombre que rigió los destinos del Instituto Di Tella en su época más explosiva.

En Evocando a Gombrowicz (editorial Galerna), Grinberg recorre la amistad que lo unió al autor de Ferdydurke durante los últimos años de su exilio argentino. El libro reúne además textos sobre el escritor polaco de Virgilio Piñera, Jorge Di Paola y Jorge Lavelli, entre otros.

Ampliar la conciencia

–En los ’60 muchos estaban convencidos de que las obras de arte debían contagiar conciencia política. ¿Usted compartía esta postura?
–Si bien había mucha gente que concebía al arte como una herramienta política, yo personalmente sentía que se trataba de una visión parcial. Lo político soslaya el mundo espiritual, que no está sujeto a la ideología, a la configuración de un partido o a un grupo presuntamente iluminado que quiere transformar la sociedad. Yo pertenecía a una corriente que se dio espontáneamente en toda América, y que tomaba herramientas como el cine, la poesía o la música para la expansión de la conciencia.

–¿Cómo fue esa corriente?
–En Estados Unidos tomó una configuración más psicodélica, con los hippies, pero en nuestro caso fue algo netamente experiencial y hasta existencialista, en un sentido profundo.

–¿En qué dirección se movieron las expectativas de un cambio?
–La visión política se exacerbó, en lo que hoy llamamos el setentismo, con la utopía de la violencia, a la cual yo y buena parte de mi generación no adherimos.

–Los sectores volcados a la política, ¿tildaban de ingenuos a los grupos más afines a una línea espiritual?
–Sí. Recuerdo haber tenido experiencias muy decepcionantes con figuras de la época. En algunos casos era peor que tildarnos de ingenuos. Por nuestra simpatía con la generación beat, el movimiento negro norteamericano e incluso con la música estadounidense, se corría la bolilla de que yo era financiado por la CIA para generar confusión en las filas revolucionarias. Eran los años del foquismo, el emblema era la Revolución Cubana y estábamos en los umbrales de la guerra de Vietnam. Lo cierto es que en algunos casos nos tildaban de ingenuos y en otros de cómplices del enemigo.

–¿En este contexto aparece “América”, de Allen Ginsberg, en una traducción suya publicada en “Eco Contemporáneo”?
–Sí, yo terminé sacando con Antonio Dal Masseto la revista Eco Contemporáneo, a finales de 1961, porque me rechazaron todas las revistas literarias de izquierda: fundamentalmente El escarabajo de Oro, de Abelardo Castillo, y La Gaceta Literaria, de la gente más vinculada al Partido Comunista (PC), donde estaba Pedro Orgambide. Todo lo que fuera norteamericano, e incluso todo lo que fuera latinoamericano y no estuviera embanderado con la Revolución Cubana, era considerado reaccionario. Yo tuve que soportar ese tipo de desprecio, que no era sólo una crítica light, sino un profundo desprecio.

–¿A qué se refiere exactamente?
–Puedo dar un ejemplo. A fines del año ‘61, salió al mismo tiempo que Eco Contemporáneo una revista mejicana que se llamaba El corno emplumado, donde publicaba Ernesto Cardenal. Compartíamos el contacto con la generación beat y el incipiente movimiento hippie. ¿Qué ocurrió? La Casa de las Américas de La Habana nos invitó a nosotros a ser jurados del premio literario de 1965. Y la propia directora, Haydée Santamaría, heroína de la Sierra Maestra, un día me muestra una carta y me dice: “¿Éstos son amigos tuyos?”. Era una carta firmada por la flor y nata de los poetas argentinos del PC repudiando mi invitación.

Los puentes del rock

–¿En la Argentina el rock contribuyó a ampliar la mirada?
–Desde luego que sí. El rock, desde sus primeros pasos, en 1965, nunca estuvo embanderado con ningún tipo de actitud violenta. Esto fue muy notorio en 1973 y 1974, cuando la utopía de la violencia tuvo muchos partidarios. Recuerdo bien a mucha gente, que provenía del marxismo o del trotskismo, que gracias al rock nacional comenzó a darse cuenta de que había otra realidad. Sui Generis dio vuelta a mucha gente, por su contenido musical y poético, y porque desde un lugar que no era el de la ideología partidaria cantaba el difícil oficio de ser joven en la Argentina. El rock contribuyó a crear puentes entre la gente que estaba mucho más espiritualizada y los que estaban más ideologizados.

–Las utopías contenidas en canciones, libros y películas, ¿simplemente fracasaron?
–En 1972, en Contrarrevolución y revuelta, un libro profético de Herbert Marcuse que prácticamente no se leyó, se preanunciaba que ante el contenido revolucionario de la insurrección juvenil a nivel global el sistema iniciaba una operación de contrarrevolución. Ahí empezó la represión violenta y la creación de sucedáneos masivos. Para neutralizar el rock, la industria creó decenas de grupos parecidos a los rockeros progresistas. El mercado se saturó con expresiones triviales, con la apariencia de los movimientos originales.

Gombrowicz, el iconoclasta

–¿En qué contexto lo conoció a Gombrowicz?

–Él se fue de la Argentina en abril de 1963, y yo lo conocí los dos últimos años de su permanencia en el país. Lo que me atrajo de Gombrowicz fue su carácter iconoclasta y crítico de la hipocresía social. Su literatura, de primera línea, era prácticamente una denuncia de la hipocresía seudo cultural de cualquier lugar del planeta. Es una figura emblemática que ha tenido que esperar 35 años después de su muerte para que Polonia celebre el centenario de su nacimiento, y para que una editorial española distribuya sus novelas en la Argentina, que eran inencontrables.

–¿Qué le desagrada tanto a Gombrowicz de Borges?
–En una entrevista que le hice en vísperas de su despedida, Gombrowicz cita al escritor francés André Gide (cosa que hace también en sus diarios) cuando se refiere a los sudamericanos y dice, literalmente: qué podemos esperar de una gente cuya mayor expectativa es parecerse a nosotros. Lo que en cierta manera le molestaba a Gombrowicz en relación a Borges y al grupo Sur es que eran afrancesados, tenían maneras europeas pero de segunda mano. No cuestionaba a Borges como escritor, sino su actitud europeísta. Gombrowicz negaba al cenáculo porteño hechizado por París como si fuera un espejismo, cuando toda la generación del ’60 miraba hacia América.


Perfil
Escritor, poeta e investigador de corrientes alternativas, Miguel Grinberg editó en la década del ’60 la revista Eco Contemporáneo. En los ’70, documentó las raíces del rock progresivo argentino en su libro, ya clásico, Cómo vino la mano. Trabajó en revistas como Canta-Rock y, en los ’80, editó Mutantia. El año pasado, Editorial Galerna publicó su antología de poetas de la generación beat titulada Beat Days.

mayo 09, 2006

MAS REVELADOR QUE EL CÓDIGO DA VINCI


YA APARECIO!!

LA LLEGADA DEL CRISTO CÓSMICO

libro de MATTHEW FOX

(Sanación de la Madre Tierra y Surgimiento de un Revivir Global)
Ediciones Uriel-Satori

En venta en librería Kier - Av. Santa Fe 1260 - Buenos Aires

mayo 04, 2006

95 TESIS DE MATTHEW FOX













95 TESIS EN LA PUERTA DE LA CATEDRAL DE WITTENBERG, DE NUEVO. INICIATIVA DEL TEÓLOGO MATTHEW FOX 20-6-2005

Traducción de Manuel Madrid.

WITTENBERG.- “Quiero pasar de la Reforma a la transformación, y ha llegado el momento. Pero la Reforma es el primer paso. Y Wittenberg es arquetípica, representa un lugar donde alguien hace tiempo se levantó contra el poder de la Iglesia y dijo: “Basta”. Y así, al igual que aquel “alguien” hizo en 1517, Lutero, hoy el teólogo americano Matthew Fox ha expuesto delante de la Catedral de la ciudad alemana “sus” 95 tesis para una reforma, una “nueva reforma” para una Iglesia que está en crisis. Matthew Fox, autor de 26 libros, ex-dominico, ha fundado la Wisdom University en Oakland, California. Protagonista en los años 80 de debates teológicos, en los que su rival era el entonces Cardenal Ratzinger, prefecto para la Doctrina de la Fe, fue por esto castigado en el año 88 por sus posiciones en relación con la moral sexual con un año sabático forzado. Fox continuó su trabajo junto al Institute in Culture and Creation Spirituality por él instituido primero en Chicago y después en Oakland, pero continuó siendo objeto de ataques por parte de la derecha católica americana, que lo acusaba de posiciones panteístas new age junto a los teólogos de la liberación y a Teilhard de Chardin. En 1992, la expulsión de la Orden dominica (en la que había desarrollado su ministerio durante 34 años), motivada, no oficialmente por sus posiciones teológicas, sino por su rechazo a obedecer la orden del Superior de trasladarse a Chicago, así como la clausura de los programas del Instituto. Fue entonces cuando Fox, después de llegar a la Iglesia episcopaliana, dio vida, ayudado por el obispo episcopaliano de Oakland, a una Universidad propia: la University of Creation Spirituality que después se convertiría en Wisdom University.


Fox ha elegido la fórmula de las tesis porque “la finalidad tradicional de una tesis es abrir un debate constructivo para la búsqueda de la verdad”, ha dicho, pero “Una nueva reforma” es también el título del libro que ha publicado en tiempo récord el día siguiente de las elecciones al solio pontificio de Ratzinger. “El plazo no fue fijado por nosotros –ha explicado Fox en el blog presente en su página web- sino por las circunstancias de mi invitación a hablar en Pentecostés a Bad Herlaub, invitación planificada seis meses antes, pero que ha parecido más importante después de la elección de Benedicto XVI. He oído que el escándalo de este hecho, que el primer inquisidor general fuera elegido Papa, habría llamado la atención de la gente y les habría empujado a la búsqueda de una nueva reforma”. “¿Por qué no perdonas al cardenal Ratzinger?, me ha preguntado una señora”, prosigue Fox. “Porque antes viene la justicia, después el perdón”, he respondido”.

A continuación publicamos el texto de las 95 tesis, en nuestra traducción del italiano.

Como Lutero, presento 95 tesis o, en mi caso, 95 observaciones de fe sacadas de mis 64 años de vida y de práctica de la religión y de la espiritualidad. Se que no estoy solo en el reconocimiento de estas verdades. Para mi representan un retorno a nuestros orígenes, un retorno al espíritu y a la enseñanza de Jesús y de sus profetas predecesores y de Cristo, un espíritu que la presencia y la enseñanza de Jesús han liberado.

1. Dios es Madre y Padre
2. En este momento histórico, Dios es más Madre que Padre, porque la parte femenina es la parte más postergada y es importante volver al originario equilibrio de género.
3. Dios es siempre nuevo, siempre joven y siempre “original”
4. Dios, entendido como Padre que castiga, no es un Dios digno de ser honrado sino un falso dios y un ídolo que sirve a quienes construyen imperios. La noción de un Dios que castiga, del todo masculino, es contraria a la plena naturaleza de la divinidad que es tanto femenina y maternal como masculina y paternal.
5. “Todos los nombres que damos a Dios derivan de una comprensión de nosotros mismos”(Eckhart). Por lo tanto, las personas que adoran un padre que castiga son, ellos mismos, castigadores
6. El teísmo (la idea de que Dios está “allí fuera” por encima o en otros universos) es falso. Todas las cosas están en Dios y Dios en todas las cosas (panenteísmo)
7. Cada uno nace capacitado de inteligencia mística y de amor, capaz de vivir la unidad de las cosas y todos estamos llamados a mantener vivas esta mística y este amor a la vida
8. Todos estamos llamados a ser profetas, lo que significa intervenir en la injusticia
9. La sabiduría es amor a la vida (cfr. Libro de la Sabiduría: “Esta es la sabiduría: amar la vida” y Cristo en el evangelio de Juan: “Yo he venido para que tengáis vida y la tengáis en abundancia”).
10. Dios ama toda la creación. La ciencia nos puede ayudar a penetrar de forma más profunda y a apreciar los misterios y la sabiduría de Dios en la creación. La ciencia no es enemiga de la verdadera religión.
11. La religión no es necesaria, pero la espiritualidad sí lo es
12. “Jesús no nos llama a una nueva religión sino a la vida”(Bonhoeffer). La espiritualidad es dar la vida en profundidad de frescura y gratitud, coraje y creatividad, confianza y disponibilidad, compasión y justicia.
13.Espiritualidad y religión no son la misma cosa así como no lo son la educación y el aprendizaje, derecho y justicia u comercio o servicio.
14. Los cristianos deben distinguir entre Dios (masculino e historia, liberación y salvación) y divinidad (femenino y misterio, ser y no hecho)
15.Los cristianos deben distinguir entre Jesús (figura histórica) y Cristo (la experiencia de Dios en todas las cosas)
16. Los cristianos deben distinguir entre Jesús y Pablo
17. Jesús, como muchos maestros espirituales, nos ha enseñado que somos hijos e hijas de Dios y que debemos actuar en consecuencia, siendo instrumentos de la com-pasión divina.
18. La eco-justicia es una necesidad para la supervivencia del planeta en la ética humana, y sin ella crucificamos continuamente a Cristo a través de la destrucción de los bosques, del agua, de las especies, del aire y del suelo.
19. La sostenibilidad es otra palabra para indicar justicia, porque lo que es justo es sostenible y lo que es injusto no lo es.
20. Una opción preferencial por los pobres, como se encuentra en el movimiento de las Comunidades de base, es mucho más próximo a la enseñanza y al espíritu de Jesús, que la opción preferencial por los ricos y los poderosos como hace, por ejemplo, el Opus Dei.
21. La justicia económica pide un trabajo de creatividad para dar vida a un sistema económico que sea global, respetuoso de la salud y del bienestar de los sistemas planetarios y que funcione para todos.
22. La celebración y el culto son importantes para la comunidad y para la supervivencia humana y estos hechos, que hacen memoria de la alegría, merecen nuevas formas que hablen la lengua del siglo veintiuno
23. La sexualidad es un acto sagrado y una experiencia espiritual, una teofanía (revelación de lo divino), una experiencia mística. Es sagrada y merece ser honrada como tal.
24. La creatividad es el don más grande dado a la humanidad pero también el arma más potente para llevar a cabo el mal y, por lo tanto, se necesita animarla y dirigirla hacia aquella actividad humana que es la más parecida a la de Dios y sobre la que todas las religiones están unidas: la compasión
25. Hay un sacerdocio de todos los trabajadores (aquellos que hacen un buen trabajo son intermediarios de gracia y, por tanto, sacerdotes): este sacerdocio debe ser honrado como sagrado y los trabajadores deben recibir una formación espiritual para llevar adelante su ministerio eficazmente.
26. El imperialismo es incompatible con la vida y con la enseñanza de Jesús, con la vida y la enseñanza de Pablo y con la enseñanza de las religiones sagradas.
27. La ideología no es teología y la ideología pone en riesgo la fe porque sustituye el pensamiento con la obediencia y distrae de la responsabilidad de la teología de adaptar la sabiduría del pasado a las exigencias de hoy. En cambio, de la teología, la ideología pide juramento de fidelidad al pasado.
28. La fidelidad no es un criterio suficiente para el oficio eclesial: lo son la inteligencia y la probada conciencia.
29. No importa cuánto aludan al papa y al papado los medios televisivos para hacer espectáculo: el papa no es la Iglesia sino que desarrolla un ministerio dentro de ella. La “papolatría” es una forma contemporánea de idolatría y todos los creyentes deben oponerla resistencia.
30. Crear una Iglesia de “sicofanti” (el diccionario Webster los define como “oportunistas aduladores serviles”) no es una buena cosa. Los “sicofanti” no son personas espirituales porque su única virtud es la obediencia. Una sociedad de “sicofanti” –sacerdotes, seminaristas, obispos, cardenales, órdenes religiosas como el Opus Dei, los Legionarios de Cristo y Comunión y Liberación, y la prensa “sicofante”- no representan de ningún modo las enseñanzas o la persona del Jesús histórico que ha elegido resistir al poder en vez de acumularlo.
31. El “secreto pontificio” es una forma de corrupción y de secretismo en la Iglesia como en tantas organizaciones humanas.
32. El pecado original es una expresión extrema de un Dios padre que castiga y no es una enseñanza bíblica. Pero la bendición original (bondad y gracia) es bíblica.
33. El término “herida original” describe mejor que “pecado original” la separación que los seres humanos viven dejando el seno materno y entrando en el mundo, un mundo a menudo injusto y no acogedor.
34. El fascismo y la obsesión por el control no son un recorrido de paz o de com-pasión, y los que aplican métodos fascistas no son modelos de santidad. El abuso del aparato de las canonizaciones para canonizar fascistas es una mancha sobre la Iglesia.
35. El espíritu de Jesús y de los otros profetas llama a las personas a estilos de vida simple, para que las personas “puedan vivir”.
36. La danza, cuyo significado original en muchas culturas indígenas es lo mismo que la respiración o el espíritu, es una forma antigua y muy apropiada con la que orar.
37. Honrar a los antepasados y celebrar la comunión de los santos no significa poner unos héroes sobre el pedestal sino honrarlos viviendo su vida de imaginación, coraje y compasión en nuestro tiempo, en nuestra cultura y en nuestro momento histórico como ellos hicieron en el suyo.
38. Hay que esperar y acoger con agrado las diversas interpretaciones del acontecimiento Jesús y de la experiencia de Cristo así como sucedía en los primeros tiempos de la Iglesia
39. La unidad de la Iglesia no significa, por lo tanto, conformidad. Hay unidad en la diversidad. La unidad impuesta no es unidad.
40. El Espíritu Santo está perfectamente en condiciones de actuar a través de una democracia participativa en las estructuras eclesiales. Los modos de ser jerárquicos pueden interferir con la acción del Espíritu Santo.
41. Hay que respetar el cuerpo como templo sagrado de Dios; eso no significa que sea intangible, sino que todas sus dimensiones, bien definidas por siete chakra, son igualmente sagradas.
42. Así, nuestro vínculo con la tierra (primer chakra) es sagrado; nuestra sexualidad (segundo chakra) es sagrada; nuestra capacidad de indignación moral (tercer chakra) es sagrado; el amor que se opone al miedo (cuarto chakra) es sagrado; nuestra voz profética que habla en voz alta es sagrada (quinto chakra); nuestra intuición e inteligencia (sexto chakra) son sagradas; los dones que compartimos con la comunidad de seres de luz y de antepasados (séptimo chakra) son sagrados.
43. El prejuicio racionalista y la parte izquierda del cerebro, la racional, deben ser equilibrados desde la atención a los chakras inferiores como lugares en los que la sabiduría, la verdad y el Espíritu actúan.
44. El chakra central, la com-pasión, es el test para todos los demás chakras, que deben servirlo porque “por sus frutos los conoceréis” (Jesús)
45. “La alegría es el más noble acto humano” (Santo Tomás). Nuestra cultura con su educación, la religión y sus profesiones, ¿promueve la alegría?
46. El alma humana está hecha por el cosmos y no estará satisfecha hasta que no esté reunida con él. De esta reunión derivará un respeto profundo, inicio de la sabiduría.
47. Los “cuatro senderos” (vía positiva, vía negativa, vía creativa, vía transformativa) nombrados por la tradición espiritual de la creación, definen el viaje espiritual místico-profético de Jesús y de la tradición hebraica más plenamente que las tres calles de la expiación, de la iluminación y de la unión que no derivan de la tradición hebrea ni bíblica.
48. Así pues, se puede afirmar que a Dios se le vive en las experiencias de éxtasis, alegría, maravilla y delicia (vía positiva)
49. Se vive a Dios en la oscuridad, en el caos, en la nada, en el sufrimiento y aprendiendo a dejar fluir las cosas (vía negativa)
50. Se vive a Dios en los actos de creatividad y de con-creación (vía creativa)
51. Todas las personas nacen siendo creativas. Es tarea de la espiritualidad dar ánimos a la sagrada imaginación para todos los que han nacido “a imagen y semejanza” del Uno Creativo y “el orgullosos poder de la imaginación es un don de Dios”(Cabalah).
52. Si puedes hablar, puedes cantar; si puedes caminar, puedes danzar; si puedes hablar, eres un artista (proverbio africano y dicho de los nativos americanos)
53. Se vive a Dios en nuestra lucha por la justicia, en el cuidado, en la compasión y en la celebración (vía transformativa)
54. El Espíritu Santo obra a través de todas las culturas y de todas las tradiciones espirituales y sopla “donde quiere”, no es dominio exclusivo de una tradición y nunca lo ha sido.
55. Dios habla, hoy como en el pasado, por medio de todas las religiones y todas las culturas y todas las tradiciones de fe, ninguna de las cuales es perfecta y camino exclusivo hacia la verdad, pero todas pueden aprender unas de otras.
56. Por eso la interreligión o el ecumenismo profundo son parte necesaria de la práctica y de la consciencia en nuestro tiempo.
57. Ya que “el primer obstáculo para la interreligión es una mala relación con la propia fe” (Dalai Lama), es importante que los cristiano conozcan su tradición mística y profética, que es más amplia que una religión del imperio y que las imágenes de un Dios padre justiciero.
58. El cosmos es el templo santo de Dios y nuestra sagrada morada.
59. Catorce mil millones de años de evolución y de expansión del universo expresan la íntima sacralidad de todo lo que existe.
60. Todo lo que existe es sagrado y todo lo que existe está en interrelación, porque todo lo que existe en nuestro universo ha sido iniciado como ser indivisible antes de que tuviera lugar la gran explosión.
61. La interrelación no es sólo una ley de la física o de la naturaleza, sino que forma también la base de la comunidad y de la compasión. La compasión es el modo en el que se expresa nuestra interrelación compartida tanto a nivel de alegría como de sufrimiento y de lucha por la justicia
62. El universo no sufre una falta de gracia y ninguna institución religiosa debe considerar que su tarea es racionar la gracia. La gracia es abundante en el universo de Dios.
63. La creación, la encarnación y la resurrección suceden continuamente a nivel personal y cósmico. Así también la vida, la muerte y la resurrección (regeneración y reencarnación) suceden a nivel cósmico y personal.
64. La biofilia o amor por la vida, es la tarea cotidiana de cada uno.
65. La necrofilia, o amor a la muerte, debe ser contrarrestada en sí y en la sociedad en todas sus formas.
66. El mal puede ocurrir a través de cualquiera, a través de cualquier nación, de cualquier pueblo, de cualquier individuo y, así pues, la vigilancia y la autocrítica y la crítica institucional son siempre necesarias.
67. No todos los que se llaman “cristianos” merecen este nombre así como “no todos los que dicen ‘Señor, Señor’ entrarán en el reino de los cielos” (Jesús)
68. La pedofilia es un terrible error, pero su ocultación por parte de la jerarquía es todavía más despreciable.
69. La fidelidad y la obediencia no son nunca una virtud mayor que la conciencia y la justicia.
70. Jesús no ha dicho nada sobre el condón, sobre el control de la natalidad o sobre la homosexualidad
71. Una Iglesia más preocupada por los errores sexuales que por los causados por la injusticia está enferma.
72. Ya que la homosexualidad se encuentra en 464 especies y en el 8% de la población humana, es natural para aquellos que han nacido así y es un don de Dios y de la naturaleza a la comunidad.
73. La homofobia en cualquier forma es un grave pecado contra el amor al prójimo, un pecado de ignorancia de la riqueza y de la diversidad de la creación de Dios, y también un pecado de exclusión.
74. Racismo, sexismo y militarismo son, también ellos, graves pecados.
75. La pobreza para muchos y el lujo para pocos no son justos ni sostenibles.
76. El consumismo es la versión moderna de la codicia y debe ser combatido creando un sistema económico al servicio de todos y todas las criaturas de la tierra.
77. Los seminarios, tal y como los conocemos, con su excesivo acento en el trabajo racional, a menudo matan y corrompen el alma mística de los jóvenes en vez de animar al misticismo y a la conciencia profética. Deberían ser sustituidos por escuelas de sabiduría.
78. Todos necesitamos un trabajo interior. Por eso, las prácticas de meditación espiritual deben ser accesibles a todos y esto ayudará a calmar el reptilian brain (la parte del cerebro menos racional, más primitiva, similar a la de los reptiles, ndt.). El silencio o la contemplación y el aprendizaje del sosiego pueden y deben ser enseñados a todos los niños y adultos.
79. Un trabajo exterior necesita fluir desde nuestro trabajo interior, así como la acción fluye de la no acción y la acción verdadera del ser.
80. Una prueba para saber si una acción es justa es ésta: ¿cuál es el efecto de esta acción sobre las personas desde aquí hasta dentro de siete generaciones?
81. Otra prueba para saber si una acción es justa es ésta: lo que estoy haciendo, lo que estamos haciendo, ¿es bello o no?
82. Eros, la pasión por la vida, es una virtud que combate la pereza o la falta de energía para iniciar cosas nuevas y se expresa también con la depresión, el cinismo y la indolencia.
83. La noche oscura del alma desciende sobre nosotros y la respuesta más idónea no es la dependencia de las compras compulsivas, del alcohol, de las drogas, de la TV, del sexo o de la religión sino, más bien, seguir la oscuridad y aprender de ella.
84. La noche oscura del alma es un lugar de aprendizaje de gran profundidad. Se necesita sosiego.
85. No hay una sola noche oscura del alma sino también una oscura noche de la sociedad y una noche oscura de nuestra especie.
86. El caos es amigo y maestro y parte integrante del preludio de un nuevo nacimiento. Por eso no debe ser temido o controlado por la fuerza.
87. La ciencia auténtica puede y debe ser una de las fuentes de sabiduría de la humanidad porque es una fuente de sagrado respeto, de maravilla infantil y de verdad.
88. Cuando la ciencia enseña que la materia es frozen light (“luz congelada”, físico David Bohm) se trata de un pensamiento que libera la carne del ser chivo expiatorio en cuanto negativo, y nos asegura, en cambio, el hecho de que todas las cosas son luz. Esta misma enseñanza se encuentra en el evangelio cristiano (Cristo es luz en todas las cosas) y en la enseñanza budista (la naturaleza del Buda está en todas las cosas).
89. Los objetivos propios del corazón humano son la verdad y la justicia (Santo Tomás) y todos tienen derecho de alcanzarlo con una sana educación y un sano gobierno.
90. “Dios” es sólo uno de los nombres del Uno divino y hay un número infinito de nombres para Dios y la divinidad, sin embargo Dios “no tiene ni tendrá nunca nombre” (Eckhart).
91. Tres caminos hacia el corazón son el silencio, el amor y el dolor.
92. El dolor en el corazón del hombre debe ser curado con rituales y prácticas que, puestos en práctica, aplaquen la rabia y consientan a la creatividad socorrer de nuevo.
93. Dos caminos que parten del corazón son la creatividad y los actos de justicia y com-pasión.
94. Ya que los ángeles aprenden exclusivamente gracias a la intuición, cuando desarrollamos nuestros poderes de intuición podemos esperar encontrar ángeles en nuestro camino.
95. La verdadera inteligencia comprende los sentimientos, la sensibilidad, la belleza, la gratuidad y el humor, que es un don del espíritu, con la paradoja que es hermana de todas ellas.


YA APARECIO!!

LA LLEGADA DEL CRISTO CÓSMICO, libro de MATTHEW FOX
(Sanación de la Madre Tierra y Surgimiento de un Revivir Global)
Ediciones Uriel-Satori
Distribuyen en la Argentina: Urano y Kier

mayo 02, 2006

LO SAGRADO COMO OBJETIVO


La vida humana no consiste apenas en lo que permiten experimentar nuestros cinco sentidos convencionales. Sin duda alguna, la visión, el oído, el olfato, el tacto y el gusto son recursos físicos para un desempeño directo y efectivo en el ámbito cotidiano, pero a medida que nuestra especie evolucionó surgieron otros parámetros de importancia equivalente. Más allá (y más acá) de lo sensorial está nuestro universo metafísico, trascendente o inmaterial, como se prefiera. A la par del cuerpo, la mente y el alma, están lo psíquico, lo espiritual y, claro está, también lo emocional. ¿Queda todo dicho? De ninguna manera, falta un componente crucial para nuestra epopeya planetaria: la vivencia de lo sagrado.

La etimología del término es inequívoca: concierne a las cosas divinas, a la religión, a los ritos y al culto. Equivale también a algo inviolable, purísimo, sacrosanto, venerable, profundamente respetable. Y más todavía: implica dedicación y ofrenda, y constituye algo que no se puede ofender, que es venerado y respetado, o que no se puede dejar de cumplir. El verbo consagrar da la magnitud de su compromiso. Y que en su versión más rudimentaria se aplica en el mundo de la farándula o el deporte, donde la capacidad humana de idolatría se expresa hoy con su máxima capacidad.

A determinada altura de la historia de las instituciones, la división de los asuntos sociales en sagrados y profanos, confinó lo primero en la privacidad del templo o la iglesia, y situó lo segundo en la vida pública o política.

Pero ocurre que ahora una creciente cantidad de personas se encuentra en estado de “emergencia” espiritual. Esta palabra se refiere a sensaciones emergentes, a algo que surge o nace en uno mismo, y no a un accidente que requiere atención urgente como cuando se llama a una ambulancia por un ataque cardíaco o a los bomberos por un incendio. Nada de eso: es algo que aparece de repente en la respiración, en los sentimientos, en el estado de ánimo. Por momentos es como un jinete a todo galope, en otros instantes parece una especie de mareo que nos aparta del mundo cotidiano que conocemos. ¿Se trata acaso de algo de lo cual debemos “curarnos”? ¿Es un trastorno de la mente que requiere una “terapia”? De ninguna manera. Es una señal de que en nosotros se está desplegando una faceta evolutiva. Un ser nuevo está naciendo en nuestra alma. Y eso nos toma por sorpresa porque no fuimos preparados para semejante descubrimiento. La especie humana está en una transición evolutiva.

La meditación es una mirada profunda que puede impulsar la percepción de lo sagrado sin que ello implique el sometimiento a un dogma. El maestro vietnamita Thich Nhat Hanh comenta: “Una vida es mucho. Hay que saber, pues, utilizar su tiempo a fin de poder tocar en profundidad esta realidad maravillosa que está en nosotros y a nuestro alrededor. Hemos sufrido mucho, pero no hemos tenido bastante tiempo para vivir, para mirar, para tocar la vida en profundidad, entonces es preciso cambiar. El consumo acapara todo nuestro tiempo. Entonces hay que reorganizar nuestra vida, crear una nueva civilización más espiritual. Es preciso ir contra la corriente actual. Es preciso dar a nuestros niños una nueva oportunidad, una nueva forma de vida, una nueva espiritualidad.”

Es preciso aprender a convivir con lo sagrado. Asumirlo como un atributo natural de nuestra esencia, como una danza suprema que se ofrece a nuestro paso y a cada instante. Algo así como una ceremonia de bodas con el universo. Tenue y sin reservas.

Miguel Grinberg